Colocar correctamente los objetos, mascotas y personas que transporta un vehículo es fundamental para garantizar la seguridad en el desplazamiento en coche y minimizar los riesgos potenciales en caso de accidente.

Según datos que maneja Cleverea, ante un frenazo, cualquier objeto que viaje suelto en la parte trasera de un vehículo multiplica por 40 su peso si se circula a tan solo 50 kilómetros por hora. De esta manera, un pasajero de 75 kilos golpearía el asiento delantero con una fuerza equivalente a un peso de 4,2 toneladas, en lo que se conoce como el “efecto elefante”. Por ello, y para evitar posibles accidentes, los expertos de Cleverea nos muestran cómo deben ir en un coche las maletas, las mascotas y los niños, además de qué objetos pueden llegar a ser peligrosos y las sanciones a las que nos exponemos si no lo hacemos correctamente.

 

Cómo colocar a animales dentro del coche

 

Cuando se viaja con animales hay que garantizar su seguridad y, de paso, la de los pasajeros que están en el vehículo. Existen varias maneras de transportar a las mascotas de forma segura.

 

Transportines o jaulas

Son perfectos para gatos y perros de tamaño pequeño. Deben estar ventilados y ser lo suficientemente espaciosos para que la mascota pueda estar cómoda, y anclarse convenientemente.

Arnés de seguridad

Resultan convenientes para perros más grandes. Estos arneses están diseñados para sujetar al perro al cinturón de seguridad o a los anclajes del coche.

Rejillas o barreras

Si el animal es grande o no puede ir en un transportín, se puede instalar una rejilla o barrera lo suficientemente robusta para separar el maletero del resto del vehículo, de manera que pueda detener al animal en caso de un frenado repentino.
En cualquier caso, hay que garantizar que la zona donde está el animal tiene una buena ventilación y que se establecen los descansos necesarios para que la mascota pueda comer, beber agua o hacer sus necesidades, siempre con supervisión.

La seguridad de los niños en los desplazamientos

 

Garantizar la seguridad de los niños en cualquier desplazamiento que se haga en el vehículo, incluso aunque sea una corta distancia, es de suma importancia. Expertos de Cleverea señalan algunos aspectos a tener en cuenta:

 

Sistemas de retención infantil

Los niños viajen siempre con un sistema de retención infantil homologado hasta que midan 135 centímetros de altura. Los bebés y niños pequeños disponen de sistemas de retención infantil que se deben elegir en función de la talla y el peso, mientras que los niños algo más mayores pueden utilizar sillas elevadoras.

Orientación de los asientos

Los asientos para bebés deben estar orientados hacia el sentido opuesto a la marcha hasta que el niño alcance el límite de peso o altura establecido por el fabricante del asiento. Después, los niños deben viajar en sillas elevadoras, preferiblemente con respaldo, hasta que puedan usar los cinturones de seguridad del automóvil de manera segura.

Instalación de los sistemas de retención

Es fundamental instalar el sistema de retención infantil de manera adecuada, siguiendo las instrucciones del fabricante y las recomendaciones del automóvil.

Ubicación de los niños

Los niños deben estar situados en los asientos traseros del vehículo, preferiblemente en la plaza trasera central, ya que se considera el asiento más seguro. Nunca hay que colocar la silla en un asiento con airbag, tanto delantero como trasero, a no ser que pueda desconectarse.

Supervisión constante

Los niños deben estar bajo supervisión constante de un adulto mientras viajan en un automóvil. Si viajan solo con el conductor hay que asegurarse de que estén sujetos de manera segura y cómoda durante todo el trayecto.

Organización y distribución de maletas

Cuando se llevan maletas en un desplazamiento en coche es importante seguir algunas pautas para garantizar una distribución adecuada del peso y maximizar la seguridad de los ocupantes del vehículo.

 

Mejor en el maletero

El maletero es el lugar ideal para colocar las maletas. Hay que asegurarse de utilizar todo el espacio disponible de manera eficiente, colocando las maletas más grandes y pesadas en el fondo, cerca del respaldo de los asientos traseros, para mantener un centro de gravedad bajo.

Distribución uniforme del peso

Para mantener la estabilidad del coche durante la conducción hay que evitar colocar todo el peso en un solo lado, ya que esto puede afectar el equilibrio del coche.

Asegurar las maletas

Utilizar correas o redes de carga para asegurar las maletas y evitar que se muevan es conveniente en caso de que exista espacio libre que las permita desplazarse. Asegurarlas reducirá el riesgo de que se deslicen o vuelquen en caso de maniobras bruscas o frenadas repentinas.

Accesorios de almacenamiento

Si el vehículo no dispone de un maletero lo suficientemente espacioso se pueden utilizar accesorios de almacenamiento adicionales, como un portaequipajes en el techo o un remolque pequeño, siempre que el peso adicional no exceda la capacidad de carga recomendada para el coche.

No obstruir la visibilidad

Al colocar las maletas en el coche hay que evitar bloquear el campo de visión trasero o lateral del conductor. Cualquier pérdida de visibilidad debería ser compensada con espejos adicionales.

Objetos que resulta peligroso transportar en un coche

Algunos objetos pueden resultar peligrosos en caso de accidente o maniobra brusca, entre ellos los siguientes:

Objetos puntiagudos o cortantes

Cuchillos, tijeras u otros objetos afilados deben guardarse en el maletero, dentro de una caja o contenedor cerrado y lo suficientemente resistente.

Botellas de vidrio

Es preferible transportarlas en el maletero o en una caja acolchada para evitar que se desplacen y se rompan.

Productos químicos y aerosoles inflamables

A la hora de transportar combustibles, disolventes o aerosoles, que son altamente inflamables, conviene guardarlos lo más lejos posible de los pasajeros.

Herramientas pesadas

Llaves inglesas, martillos o destornilladores deberían almacenarse en el maletero, convenientemente asegurados.

Dispositivos electrónicos

Evitar tener dispositivos electrónicos sueltos dentro del automóvil, como tablets o teléfonos móviles, ya que pueden convertirse en auténticos proyectiles en caso de colisión.

Multas por llevar mal la carga

Conducir con una carga mal acondicionada, que pueda desplazarse de forma peligrosa, que tenga peligro de caída o que comprometa la estabilidad del vehículo, según el Real Decreto Legislativo 6/2015, de 30 de octubre, por el que se aprueba el texto refundido de la Ley sobre Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial, conlleva una multa que puede llegar a alcanzar los 200 euros.
Por su parte, quienes se desplacen con mascotas que no vayan convenientemente sujetas se arriesgan a una multa de 80 euros, que puede llegar hasta los 500 euros si el animal está situado en el habitáculo del conductor.
Hay personas que desconocen que llevar un accesorio colgando del espejo retrovisor, como puede ser un ambientador o un muñeco de adorno, también se considera peligroso, ya que puede dificultar la vista del conductor. Esta situación podría conllevar una multa que podría ascender hasta 200 euros, o hasta 500 si los agentes consideran que puede desprenderse afectando a la conducción.
Javier Bosch, Consejero Delegado de Cleverea, señala: “Circular con la carga bien sujeta es clave para la seguridad de los pasajeros en cualquier desplazamiento. Los niños deben viajar en sistemas de retención homologados y los objetos deben estar convenientemente sujetos para evitar daños personales en caso de colisión o accidente. Tomar conciencia de esta responsabilidad es el primer paso para un cambio de hábitos, la mejor inversión que puede realizarse en materia de seguridad”.