Una ruta por la Zona Media de Navarra es una gran aventura para la que hacen falta buenas viandas y buen descanso. Aquí os dejamos algunas sugerencias donde hacer un alto en el camino sin perder la magia en un viaje con niños a Navarra.
Hotel Pamplona El toro
El hotel El Toro de Pamplona tiene una decoración provenzal y grandes jardines para los niños.
El inicio de cualquier ruta por Navarra tiene su punto de partida en Pamplona. Este hotel a las afueras ofrece a las familias la tranquilidad que necesitan en sus vacaciones con niños. Con amplias zonas verdes que ofrecen agradables terrazas en las que tomar un café o un refresco mientras los niños juegan en el parque infantil. Sus amplias habitaciones con su decoración provenzal y con camas con dosel son el preludio de una auténtica aventura de caballeros y princesas. El emblemático edificio que ocupa este hotel data del siglo XVII y mantiene su encanto de antaño tras la profunda remodelación a la que se sometió en 2017.
Entre sus instalaciones cuenta con parking gratuito con estación de carga para coches eléctricos, spa, ludoteca, área para mascotas en las zonas verdes, wifi gratuito, servicio de habitaciones y lo que han bautizado como Servicio de Excelencia MIster10 que permite la personalización de la estancia.
En las habitaciones encontrarás tv de 50’, carta de almohadas, baño completo con secador y espejo de maquillaje, aire acondicionado y el confort del suelo de madera. Entre los servicios tienes tintorería y lavandería y la posibilidad de desayunar en la habitación. Disponen de habitaciones triples y la suite con capacidad para cuatro personas con un salón independiente. Podrás solicitar cuna sin coste adicional siempre sujeto a disponibilidad.
En el restaurante estarán encantados de calentarte el biberón o el potito o de prepararle a tu peque cualquier plato de los que les suelen gustar a los niños. La gastronomía en el Hotel El Toro de Pamplona es uno de los platos fuertes del establecimiento gracias a su concepto Cookarte (experimenta, comparte y disfruta) donde podrás disfrutar de los platos más reconocidos de cinco cocinas internacionales como la mediterránea, italiana, japonesa, mexicana y americana. Así seguro que encontrarán una deliciosa hamburguesa, pizza, sushi o burrito que les encantará.
Casa Rural La Cuca
La Casa rural La Cuca ofrece 12 plazas repartidas en cinco habitaciones.
El primer alto en la ruta después de descubrir el cerco de Artajona y los misterios de Santa María de Eunate, lo podréis hacer en Lerín. Allí, Nieves y Alfredo os recibirán en su Casa Rural La Cuca. Un alojamiento en un pueblo de esos en los que todavía los niños salen a jugar a la plaza. Con una capacidad para 12 personas, es la casa ideal para grandes familias que se juntan para pasar un fin de semana inolvidable. Distribuida en 5 habitaciones todas ellas diferentes y cada una bautizada con un nombre de pájaro. En la planta baja una gran cocina completamente equipada en la que reunir a toda la familia junto a la mesa. En la bodega de la casa, al huésped le espera una gran sorpresa: un spa de uso ilimitado en el que relajarse y disfrutar tras un largo día de aventuras. Los anfitriones gustosamente os gestionarán una visita a una bodega con D.O. Navarra o una degustación de conservas en la fábrica El Agricultor.
En su restauración se han conservado todos los elementos originales de la casa como los suelos hidráulicos, cerámicas y puertas. Al igual que ocurre en su otra casa rural La Tahona que además cuenta con un agradable jardín con barbacoa.
Información y reservas Casa rural La Cuca
Parador de Olite
En el Parador de Olite dormirás en un auténtico castillo.
Qué mejor manera de terminar esta ruta por la Zona Media de Navarra que en un castillo. El Parador de Olite está ubicado en una parte del Palacio del mismo nombre. Dormir entre los muros que ocuparon el Rey Carlos III El Noble y la Reina Doña Leonor, seguro que será una experiencia inolvidable para cualquier niño. Solo con entrar y recorrer sus pasillos entre tapices y armaduras les hará sentirse en otra época. Las zonas comunes y parte de las habitaciones del hotel están integradas en el palacio, en cuyo interior os sorprenderán vidrieras, arcadas, doseles y otros elementos propios de la Edad Media. Cuenta con habitaciones para dos adultos y un niño.
Reservar en el Parador de Olite
Dónde comer en Navarra
De pinchos por Pamplona
El Café Iruña es un clásico de Pamplona.
Aunque os pueda parecer un poco complicado, la verdad es que a los niños les fascina ir de pinchos. Ver esas barras llenas de comida les parece un sueño. Ya que la ruta se inicia en Pamplona, no podéis salir de allí sin haber ido de pinchos. Se puede comenzar por el mítico Café Iruña y entre dorados y espejos pedir unas croquetas de txangurro o una cazuelita de ciervo y ya de paso hacerte una foto con Hemingway. Acércate a la cocina Vasca de San Nicolás y pide un típico Ajo Arriero y al Bodegón Sarriá donde disfrutarás con una suculenta tostada de jamón.
Descubriendo los platos típicos de Navarra
Ajo arriero con gambas en Lerín
El Ajo Arriero es uno de los platos más típicos de Navarra con una base de tomate y bacalao pero que podéis probar en las variantes más diversas. Así en Lerín tendréis oportunidad de probarlo con gambas en el Restaurante Galo o con caracoles en el restaurante Borrasco. Pero el verdadero plato típico de Lerín es el esparrago relleno y las borrajas.
Migas típicas de Ujué.
En Ujue el menú típico son las migas con uvas con chuletas de cordero que podrás disfrutar en la terraza de Casa Urrutia con vistas a la iglesia fortaleza. Aquí las migas se hacen con ajo, champiñón, jamón y panceta.
En Navarra tienes la oportunidad de conseguir que tus hijos adoren las verduras porque aquí encontrarás los mejores espárragos, pimientos o alcachofas. Aprovecha la oportunidad de una cena mágica en el Parador en un ambiente único para pedir una parrillada de verduras de la tierra. Y para terminar una cuajada artesana como el colofón perfecto para una ruta de reyes.
Cuajada artesana en el Parador de Olite.
