Cada vez más familias se animan a incluir a sus mascotas en sus planes de viaje. Alojamientos adaptados, playas para perros y actividades pensadas para disfrutar juntos hacen que viajar con animales de compañía sea una opción cada vez más accesible. Sin embargo, para que la experiencia sea realmente placentera y segura, es importante tener en cuenta algunos aspectos clave como la planificación, el transporte y la elección de un destino adecuado.
En los últimos años, ha aumentado significativamente el número de familias que viajan con sus mascotas en España, reflejando la creciente consideración de los animales como miembros de la familia. Según un estudio de agenciaSEO.eu, entre 2019 y 2022, las búsquedas en Google sobre alojamientos pet-friendly crecieron un 93%, alcanzando unas 65,000 consultas en los meses estivales.
El auge del turismo pet-friendly ha impulsado la adaptación de numerosos destinos para acoger a familias que viajan con mascotas. Desde playas con acceso para perros hasta rutas de senderismo con espacios naturales habilitados, las opciones son cada vez más variadas. «Es fundamental comprobar si los lugares turísticos permiten la entrada de animales y conocer las normativas locales», señala Sònia Sáez, veterinaria y responsable de Comunicación en Purina España.
Las ciudades también pueden ser una buena opción si cuentan con suficientes zonas verdes y establecimientos que admitan mascotas. Restaurantes, alojamientos y parques urbanos pet-friendly pueden hacer que la experiencia sea más cómoda para toda la familia. «Siempre es recomendable consultar las normativas locales y las opiniones de otros viajeros para evitar sorpresas desagradables», aconseja Sáez.
Cómo planificar un viaje sin contratiempos
Antes de viajar con una mascota, es imprescindible revisar algunos aspectos clave. La elección del alojamiento es uno de los primeros pasos. No basta con que un hotel acepte animales, sino que debe ofrecer condiciones adecuadas para su bienestar, como zonas de recreo y espacios seguros. Algunos alojamientos incluso disponen de servicios adicionales, como camas especiales, menús específicos para perros y zonas de baño. Tal y como señala Sáez, la política de mascotas del alojamiento debe ser clara: «es fundamental verificar las condiciones específicas del alojamiento, como el número de mascotas permitidas, los tamaños aceptados, las tarifas adicionales que podrían aplicarse y los espacios por donde pueden circular.»
Es necesario tener actualizados toda la documentación e identificación de la mascota. Además del pasaporte veterinario y la cartilla de vacunación, en caso de viajar al extranjero, se debe revisar si el país de destino requiere c certificados sanitarios adicionales.
Durante el trayecto
El transporte es otro factor determinante. Si se viaja en coche, es recomendable usar transportines homologados o arneses de seguridad y hacer paradas frecuentes para que la mascota pueda moverse e hidratarse. «Nunca debemos dejar a un animal solo dentro del coche, especialmente en los meses de calor», advierte Sáez. Es importante planificar bien los descansos y elegir rutas que permitan detenerse en áreas donde los animales puedan estirar las patas.
Es posible que la mascota necesite un periodo de adaptación al transporte, por lo que Purina recomienda realizar previamente trayectos cortos para ir familiarizando a la mascota con el proceso. Unos juguetes y snacks permitirán que la mascota esté distraída durante el trayecto. «Es fundamental acostumbrar a la mascota a su transportín con antelación para reducir el estrés del viaje», sugiere Sáez.
Cuidar la salud y el bienestar de la mascota
Garantizar la salud del animal es esencial para que el viaje sea placentero. Un chequeo veterinario antes de la salida ayuda a asegurarse de que la mascota está en buen estado de salud y que tiene las vacunas y desparasitaciones al día. Además, algunas regiones pueden requerir tratamientos específicos contra parásitos como garrapatas o mosquitos.
Durante el viaje, es importante mantener la hidratación y evitar las horas de mayor calor, especialmente en verano. También se recomienda llevar un botiquín con productos básicos para primeros auxilios y localizar previamente una clínica veterinaria en el destino. «Siempre debemos llevar suficiente agua y ofrecerla con frecuencia para evitar golpes de calor», recuerda Sáez.
Otro aspecto a considerar es la alimentación. Es preferible mantener la dieta habitual del animal para evitar problemas digestivos. «Transportar su comida en envases herméticos y llevar su comedero y bebedero habituales puede ayudar a reducir el estrés y garantizar su bienestar», apunta la experta de Purina.
Actividades para compartir en familia con tu mascota
Las opciones para viajar con animales no dejan de crecer. Senderismo, rutas en la naturaleza y deportes acuáticos como el paddle surf en playas habilitadas para perros son solo algunas de las alternativas disponibles. «Cada vez hay más planes en los que nuestras mascotas pueden participar», destaca Sáez.
Algunos alojamientos, como hoteles rurales y campings, organizan actividades específicas para familias con mascotas, como circuitos de agility o talleres de adiestramiento en grupo. También hay parques temáticos y espacios naturales que permiten la entrada de perros, ofreciendo experiencias únicas para disfrutar en familia.
En las grandes ciudades, es posible encontrar tours guiados que admiten mascotas o museos al aire libre en los que se puede pasear con ellas. «Lo más importante es asegurarse de que la actividad elegida sea adecuada para el bienestar del animal y no le genere estrés», aconseja Sáez.
Convivencia y responsabilidad en los viajes
Viajar con una mascota implica también respetar a los demás turistas y cumplir las normas de cada destino. Recoger los excrementos, evitar molestias a otras personas y garantizar que el animal está controlado en todo momento son pautas esenciales para una convivencia armoniosa. Algunas zonas requieren que los perros vayan atados en todo momento, mientras que otras permiten el uso de correas extensibles o incluso la libertad en áreas delimitadas.
Es importante recordar que no todos los animales disfrutan de los viajes. «Si una mascota muestra signos de estrés en entornos nuevos o muy concurridos, es preferible buscar una alternativa como una residencia o un cuidador de confianza», recomienda Sáez. Además, si se trata de un animal mayor o con problemas de movilidad, puede ser mejor optar por un destino tranquilo con acceso fácil a servicios veterinarios.
Viajar con mascotas, una experiencia enriquecedora
Con una buena planificación y teniendo en cuenta el bienestar del animal, viajar con una mascota puede convertirse en una experiencia única para toda la familia. La clave está en elegir destinos adaptados, asegurarse de que el viaje sea seguro y disfrutar de cada momento juntos. «Viajar con nuestra mascota nos permite fortalecer nuestro vínculo con ella y vivir experiencias inolvidables», concluye Sáez.