A solo una hora de Madrid, el hotel Castilla Termal Brihuega es un oasis para familias que buscan descanso, cultura y naturaleza. Situado en la antigua Real Fábrica de Paños del siglo XVIII, este hotel de cinco estrellas sorprende por su impresionante arquitectura, su spa termal con horario familiar, y un jardín romántico que invita al paseo tranquilo.
En plena Alcarria y rodeado de campos de lavanda, es el destino ideal para una escapada con niños donde la historia, el bienestar y el entorno se convierten en parte de la experiencia.
Dormir en una antigua Real Fábrica de Paños: una aventura en familia
Alojarse en el hotel Castilla Termal Brihuega es vivir en primera persona la historia de un edificio único. Inaugurada en el siglo XVIII bajo el reinado de Fernando VI, la Real Fábrica de Paños fue una joya de la industria borbónica. Su planta circular —única en Europa— fue diseñada para optimizar la ventilación y la iluminación natural, facilitando el trabajo de cientos de tejedores.
Hoy, este edificio declarado Bien de Interés Cultural se ha convertido en un hotel de cinco estrellas lleno de encanto, donde se respira la memoria de un pasado industrial que se ha transformado en lujo sostenible. A los niños les fascina descubrir que en las habitaciones aún se conservan muros de piedra originales, y por los pasillos las tinajas donde antaño se guardaba el aceite lampante.
Habitaciones perfectas para familias
El hotel cuenta con 78 habitaciones cuidadosamente diseñadas para preservar el alma del edificio sin renunciar al confort. Pensando en las familias, ofrece habitaciones triples y habitaciones comunicadas, ideales para quienes viajan con niños o en grupos.
Las habitaciones son amplias, tranquilas y con vistas al pueblo, al valle o a los jardines. El diseño combina elementos rústicos como vigas de madera o muros de piedra con detalles modernos. Las Junior Suite Triple y las Suites con sala de estar permiten descansar todos juntos, sin renunciar al espacio ni a la intimidad.
Un spa donde los niños también son bienvenidos
Uno de los grandes atractivos para las familias es el spa del hotel. La zona wellness dispone de piscina termal interior, jacuzzi, zonas de relajación y tratamientos personalizados. Y lo mejor: ¡los niños son bienvenidos!
El acceso al spa para familias está habilitado en dos tramos diarios: de 9:00 a 11:00 y de 15:00 a 17:00 horas, para que tanto pequeños como mayores disfruten del agua con tranquilidad.
El agua está entre 32 y 35 grados, perfecta para relajarse en los chorros, las camas de burbujas o el jacuzzi exterior. Además, para los adultos hay 11 cabinas de tratamientos que incluyen masajes, envolturas y experiencias sensoriales.
La Redonda, un restaurante en el corazón del hotel
El restaurante La Redonda ocupa el antiguo patio central de la fábrica, un espacio abierto y luminoso bajo una cúpula de cristal. Aquí se sirven los desayunos tipo buffet, con productos de proximidad y especial atención a los niños: bollería artesanal, zumos naturales, frutas, cereales y opciones sin gluten.
La carta incluye platos tradicionales reinterpretados, con productos de la zona como la miel de la Alcarria con D.O., el cordero alcarreño o los quesos artesanos. El equipo de cocina ofrece menús especiales para los más pequeños y platos de temporada para toda la familia. Comer aquí es saborear La Alcarria sin salir del hotel.
Jardines románticos y piscina exterior: el lugar donde desconectar
El jardín romántico que hoy rodea el hotel no fue siempre un lugar de recreo. En el siglo XVIII, estos espacios eran los antiguos secaderos de la Real Fábrica de Paños, donde se tendían los tejidos tras el tintado, aprovechando la orientación sur y la ventilación natural. A mediados del siglo XIX, este lugar se transformó en un jardín de estilo versallesco, diseñado como regalo del propietario a su esposa, con especies exóticas como caquis y rincones pensados para el disfrute.
Uno de los lugares más especiales del jardín es el Mirador de Hemingway, desde donde el célebre escritor cubrió como corresponsal la Batalla de Guadalajara en 1937. Hoy, este mirador ofrece una panorámica inigualable del valle del Tajuña y es el lugar perfecto para ver el atardecer en familia, entre historia y naturaleza.
Durante el verano, la piscina exterior situada en la zona menos protegida por patrimonio se convierte en un punto clave para las familias. Aquí los niños pueden jugar, nadar o tomar el sol mientras los padres disfrutan de las vistas al campo alcarreño.
Filosofía Castilla Termal: historia, sostenibilidad y turismo regenerativo
El grupo Castilla Termal se caracteriza por recuperar edificios con historia para darles un nuevo uso basado en el bienestar sostenible. Todos sus hoteles están ubicados en edificios patrimoniales: monasterios, conventos o palacios reconvertidos en espacios de lujo accesible y consciente.
Además, promueven el empleo local, eliminan plásticos, usan energía eficiente y apuestan por productos de kilómetro cero. En Castilla Termal Brihuega, eso se traduce en desayunos con pan del obrador del pueblo, quesos de la zona, miel con denominación de origen y vinos locales.
Y la cadena sigue creciendo: ya está en marcha la apertura de Castilla Termal Palacio de Avellaneda, en Peñaranda de Duero, y otro proyecto en Gandía.
Planes en Brihuega y alrededores con niños
Desde el hotel se pueden hacer múltiples excursiones en familia para descubrir los encantos de La Alcarria. En Brihuega, merece la pena pasear por sus fuentes, murallas y miradores.
Muy cerca, podrás visitar:
- Las cuevas árabes y la fuente de los 12 caños
- El castillo de Peña Bermeja y su cementerio histórico
- Senderos y rutas en bicicleta con empresas colaboradoras del hotel
- Catas de miel y queso organizadas en colaboración con productores locales
Puedes ampliar ideas con nuestro reportaje sobre La Alcarria en familia en Rutaenfamilia.com.
La lavanda: protagonista del verano
Durante los meses de julio y agosto, los campos de Brihuega se tiñen de violeta. El festival de la lavanda, celebrado durante dos fines de semana, se ha convertido en uno de los grandes reclamos de la comarca. Las familias pueden pasear entre los campos, visitar destilerías, hacer fotos y disfrutar de conciertos en plena naturaleza.
Castilla Termal Brihuega ofrece visitas guiadas y actividades relacionadas con la lavanda, una oportunidad única para descubrir este fenómeno natural en familia.
Eventos familiares con estilo y comodidad
El hotel también está preparado para acoger celebraciones familiares: bautizos, comuniones y cumpleaños en un entorno elegante y adaptado. Dispone de menús infantiles, salones privados y jardines perfectos para juegos o animación.
Además, su equipo de eventos personaliza cada celebración, cuidando cada detalle. Porque celebrar en Castilla Termal Brihuega es hacerlo con historia, cariño y estilo.
¿Por qué elegir Castilla Termal Brihuega para tu próxima escapada familiar?
- Porque es un hotel con historia donde dormir se convierte en una experiencia cultural.
- Porque tiene un spa termal con horario específico para familias.
- Porque cuenta con habitaciones comunicadas y triples pensadas para padres con hijos.
- Porque ofrece gastronomía local y saludable, con opciones para todos los gustos.
- Porque está rodeado de naturaleza, lavanda, jardines y rutas para explorar.
- Y porque cada detalle está pensado para que los niños y los padres disfruten por igual.