Menorca es una isla para recorrer en modo slow y compartir experiencias en familia. Aquí te proponemos planes desde rutas a caballo por los acantilados hasta la posibilidad de elaborar vuestro propio queso de Mahón.

 

 

 

Lejos de la temporada alta disfrutando del mar y las calas de Menorca, la isla ofrece fuera de temporada actividades únicas rodeados de naturaleza con sus características vallas y con la filosofía slow que tanto necesitamos las familias hoy en día. Una oportunidad de reconectar con nuestros hijos y compartir experiencias únicas al aire libre descubriendo una historia milenaria con fuertes influencias de todos los pueblos que han pasado por esta isla del Mediterráneo modelados por la Tramontana. Aquí te dejamos 12 planes únicos.

 

1 Fuerte Marlborough, el legado británico

Aquí vamos a conocer la influencia británica en la isla transportándonos al siglo XVIII al llegar a Cala Sant Esteve. Para situarnos, vamos a comenzar por recordar una canción infantil. “Mambrú se fue a la guerra”. Esta canción es de origen francés dedicada a su enemigo el general británico, Duque de Marlborough que da nombre a la fortificación. No podréis evitar recorrerla tarareándola.

Su ubicación, junto a la bocana del puerto de Mahón, era estratégica para defender la flota en la cabecera del Mediterráneo Occidental. Gran parte de la fortificación está excavada en la roca con lo que no es visible desde tierra. Está formada por una galería de contraescarpa que rodea el foso de la que salen radialmente contraminas, todo con el objetivo de proteger el recinto central heptagonal.

Sufrió varios asedios y reformas. El fuerte que hoy se visita corresponde a la última restauración de los británicos en 1798 y se acompaña de un montaje expositivo con tecnología que aguarda sorpresas para los más curiosos. El visitante se ve inmerso en la época de los asedios del Fuerte de Marlborough y en la historia tanto de Menorca como de Europa a lo largo del convulso siglo XVIII. Podréis poner a prueba vuestros conocimientos bélicos gracias al juego de preguntas de la Audioguía. Primero se recorren las galerías subterráneas, las contraminas y las salas excavadas en la roca y tras recorrer el foso, se llega a la parte superior desde donde se ve el Área Histórica del Puerto de Mahón compuesto por los restos del Castillo de San Felipe, la Torre Stuart y la fortaleza de Isabel II.

 

2 Ruta a caballo por el Cami de Cavalls

Recorrer Menorca a caballo es una forma diferente y apasionante de conocer la isla con tus hijos. Hay varias empresas que ofrecen excursiones para todo tipo de público, desde rutas cortas y fáciles para jinetes nóveles que viven esta experiencia por primera vez (con animales muy dóciles) hasta excursiones largas más complejas para personas experimentadas. Son Angel es una de las empresas que llevan más de 10 años ofreciendo experiencias ecuestres en Menorca. Si combinas el Cami de Cavalls que rodea la isla, el mar, los acantilados y el caballo menorquín, te aseguramos que vivirás una experiencia única junto a tu familia. Catalina y Toni os ofrecerán la experiencia que más se adapte a vuestros gustos y tiempo disponible. Así tendréis opción de hacer una ruta de una hora o de día completo con picnic en la playa. Pero os aseguramos que la imagen al borde de los acantilados sobre vuestro caballo menorquín no se os olvidará nunca.

 

3 Ciudadela, un recorrido por sus murallas desde el puerto

A tu llegada a Ciudadela lo primero que harás tras dejar el coche es pasear por su puerto y entre el acantilado y los barcos imaginar historias de piratas y asedios. Aunque en su origen era un puerto comercial y pesquero, ahora verás fundamentalmente embarcaciones de recreo y los mejores restaurantes y terrazas.

En la boca del puerto, verás en lo alto imponente el castillo de San Nicolás, construido a finales del siglo XVII para defender el puerto. A continuación, entrarás en el casco antiguo de la ciudad protegido como Bien de Interés cultural rodeado de la Contramuralla, un paseo que rodea todo el casco viejo amurallado, salpicado de palacios y concurridas plazas. La entrada a la zona antigua se hace por la Plaza Des Born, la antigua plaza de armas de la ciudad presidida por un obelisco de 22 metros que conmemora la defensa de la ciudad del ataque turco de 1558.

En pleno casco antiguo, se erige grandiosa la catedral de Santa María, conocida como catedral de Menorca. Fue construida en estilo gótico sobre la antigua mezquita musulmana.

 

4 Hacer queso de Mahón

Puede que hasta ahora no os hubierais percatado de la cantidad de productos procedentes de Menorca que han conquistado el mundo como la mahonesa, las abarcas o el queso de Mahón. Pues en vuestra visita a la isla podréis probar a ser queseros por un día y elaborar vuestro propio queso de Mahón.

Esta actividad se lleva a cabo en un predio que elabora el queso de manera artesanal y tiene una aula didáctica, que muestra la importancia que este producto tiene para los menorquines y todas sus propiedades nutricionales. Los niños conocerán el proceso completo ya que verán desde las vacas pastando en el campo hasta el queso ya curado. Además de explicar el proceso de elaboración del queso, se realizan varios experimentos con los niños y ellos elaboran queso en el aula. Lo presionarán, lo envolverán en la tela para que tome su tradicional forma cuadrada y lo girarán sobre la cuerda para que pierda todo su suero. También se realiza una degustación sensorial con los cinco sentidos. Es una actividad muy completa e interesante que forma parte de las experiencias que ofrece Sa Cooperativa de payeses bajo el título “Vive el campo de Menorca” con el objetivo de llevar al visitante hasta el origen de los productos para conocerlos a fondo. Además de hacer queso y llevar a los rebaños por el campo, se puede visitar un panal de abejas y ver como se hace la miel, o ir a un taller de esparto y abarcas para aprender cómo se hace este calzado que triunfa en todo el mundo.

La cooperativa lleva 5 años organizando actividades como catas sensoriales o talleres para niños y familias. Son pequeños productores que están apostando por el turismo creativo. Actividades interdisciplinares para los niños. Por ejemplo, se hace un taller de descubierta de huevos desde avestruz hasta la codorniz y se hacen experimentos científicos con los huevos para demostrar las barreras físicas que los protegen. Taller de salsa mahonesa. Se dice que al sobrino del Cardenal Richelieu le sirvieron en casa de una payesa una salsa fría hecha con un huevo, porque no tenían otra cosa y él se enamoró de la salsa y de la mahonesa que se lo sirvió. Los árabes ya utilizaban una emulsión de aceite y huevo.

También hacen recetas invertidas con frutas y verduras con niños, catas sensoriales de queso o de aceite con entrenamientos olfativos. Los talleres se reservan a través de la web de la cooperativa.

 

5 Cantera Líthica, laberinto de roca

Un espacio único que conserva las canteras de marés de Menorca convertidas en un espacio lúdico con laberintos y jardines medievales. En Líthica se ha creado el Laberinto de los Vergeles en los pequeños barrancos formados por la extracción de la roca y protegido del viento que se utilizaron como huertos y ahora se ha repoblado con vegetación silvestre formando un circuito botánico de la flora menorquina con presencia de acebuches, almendros, olivos, espino, algarrobos o granados. Y como un tesoro escondido se llega a un huerto cerrado, jardín secreto o claustro que compone el jardín medieval. Alrededor de una fuente rodeada de rosas como símbolo de vida se extienden las hierbas medicinales en un ambiente monacal que evoca al reposo y a los selfies familiares. La visita finaliza en el gran laberinto de piedra, para el que deberás reservar tiempo para perderos por sus pasillos y después encontraros.

 

6 Pueblo blanco Binivenca Vell

Aquí os podréis hacer las fotos familiares más bonitas y bucólicas en sus callejuelas blancas con el mar de fondo. Se trata de un poblado en la zona sur de la isla construido imitando las antiguas casas de pescadores, pero que en realidad es de 1972. Vale la pena perderse un rato por sus laberínticas callejuelas de pequeñas casas blancas y sus características chimeneas que, especialmente fuera de temporada, tienen todo su encanto y menos afluencia de turistas. A tus hijos adolescentes les fascinará estar en el punto más “instagrameable” de Menorca a imagen y semejanza de los pueblos del Mediterráneo como la imagen que tenemos de las islas griegas.

 

7 Senderismo hasta las calas

Menorca ofrece más de 200 km de costa con calas resguardadas a las que, muchas veces se llega a través de caminos entre pinares que suponen un agradable paseo con el premio final de unos paisajes espectaculares a pie de playa. Las del norte más rojizas salvajes con escasa vegetación y las del sur de arena blanca y aguas turquesas rodeadas de bosque.

El Parque Natural de la Albufera des Grau es el punto de partida ideal para realizar excursiones llegando a la playa familiar por excelencia que es la playa des Grau con aguas tranquilas y poco profundas. Unas de las más bellas de las islas son la Cala en Turqueta y la cala Macarella.

 

8 Ruta de los Faros, Faro de Cavallería

La isla está rodeada de faros en acantilados que evocan historias de piratas en la imaginación de los niños. Los 7 faros que recorren el litoral desde el siglo XIX vienen a aportar luz a esas embarcaciones que se topaban con los escarpados acantilados de Menorca al atravesar el Mediterráneo. Desde los más pequeños del puerto de Mahón o Ciudadela hasta los tres grandes faros septentrionales.

El más imponente es el Faro de Cavallería, que sorprende desde que te acercas por carretera con mar a ambos lados. Una vez en el faro, blanco e imponente, impresionan los casi 100 metros de altura del acantilado en el que se encuentra. Hoy en día alberga un centro de interpretación de materias náuticas y medioambientales. Al lado del faro encontrarás una pequeña cueva en la que podrás entrar

En las inmediaciones destaca el puerto que se utilizaba en la época romana, muy resguardado de los vientos.

 

9 Mahón, el mayor puerto natural del Mediterráneo

Entenderás la importancia que Mahón ha tenido a lo largo de la historia y los pueblos que la han ocupado y deseado al ver su puerto natural. Es uno de los más grandes del mundo por el que han pasado romanos, árabes, franceses y británicos y ha sido punto neurálgico de comercio en el Mediterráneo.

Un paseo por el puerto os permitirá descubrir los magníficos barcos y yates y os encontraréis con la sirenita Mó, símbolo de la capital menorquina, obra del escultor Leonardo Lucarini. Recorrer el centro de Mahón disfrutando de las casas señoriales las iglesias sin perderos el Museo de Menorca ubicado en un antiguo convento franciscano o el Teatro Principal de 1829.

Junto a la plaza de España merece la pena ver la edificación modernista que supone el mercado de pescado de la ciudad.

 

10 Mirador en la cumbre, Monte Toro

Para finalizar vuestra estancia, una gran opción es subir por la tarde al punto más alto de la isla, Monte Toro, de 358 metros de altura, desde el cual podréis ver y reconocer los lugares que hayáis visitado para contemplar después la puesta de sol. Es uno de los lugares más místicos de la isla que en días despejados podrás ver incluso Mallorca.

La cima está presidida por el santuario de la Virgen de Monte Toro construida sobre una iglesia gótica alrededor de 1670.

 

11 Menorca Talayótica, patrimonio prehistórico de la isla

Uno de los patrimonios más singulares y mejor conservados de la isla cuenta con miles de años de antigüedad y espera a ser Patrimonio Mundial de la Unesco. Se trata de una serie de construcciones prehistóricas únicas en el mundo en un perfecto estado de conservación. Destaca la organización de las diferentes construcciones de culto, viviendas y de oficios y su vinculación con el firmamento y las estrellas.

El mayor exponente es la Torre D’en Galmés en el sur de la isla. Pero que el nombre no te lleve a equívoco, no se trata de una sola torre sino un completo poblado que ocupa 5 hectáreas organizado alrededor de los grandes edificios públicos que son los talayots y la taula. En este reportaje te cuento todos los apasionantes detalles de la Menorca Talayótica.

Menorca Talayótica, un patrimonio arqueológico único en el mundo

 

12 Caldereta de langosta, gastronomía del mar

Es una de las recetas tradicionales de Menorca, un plato excepcional para cosaiones especiales. El sabor de la langosta se potencia con un sofrito de cebolla, tomate, ajo, perejil y pimiento y se sirve con rebanadas de pan de payés. La clave de este plato es es la langosta menorquina. Aunque la versión original de este plato era con pescado de roca con el que se preparaban los calderos.

En cualquier caso, la gastronomía menorquina se basa en la tradición marinera transmitida generación tras generación. Algunos restaurantes tienen su propia barca que sale al amanecer para traer el pescado que se degustará en sus platos.

 

Volar con Iberia a Menorca

Iberia Menorca

Baleares es una de las grandes apuestas de Iberia también para disfrutar en una escapada invernal. Para ello, el Consell Insular de Menorca y la Fundació Foment del Turisme de Menorca han apostado por incentivar la conectividad aérea, con vuelos semanales directos a las principales capitales españolas o a islas cercanas, como Mallorca o Ibiza.

Air Nostrum es la compañía del grupo Iberia que opera hasta la isla en la temporada baja. Así desde Madrid, ofrece dos vuelos diarios lo que supone un total de 14 semanales. En Palma de Mallorca,  ofrece 47 vuelos semanales y en Valencia opera con dos vuelos, los viernes y domingos.

Iberia ha aumentará su servicio durante los días 22, 27 y 28 de diciembre con dos frecuencias más diarias. El día 22 de diciembre el refuerzo se realizará con un vuelo de salida desde Menorca a las 18.30 h y otro a las 22.35 h. Los días 27 y 28 de diciembre, las salidas de refuerzo se realizarán a las 10.55 y a las 13.00 h.

Para los más pequeños, y sus padres, Iberia ofrece facilidades para que sea una experiencia positiva desde el primer momento en que llegan al aeropuerto. En la T4 del aeropuerto de Madrid las familias disponen de mostradores especiales, para agilizar todos los trámites. Los carritos de bebés se pueden bien facturar –el personal de facturación ofrece a los clientes una bolsa para que vayan más protegidos-, o ir con él hasta la puerta del avión. Allí lo bajan los operarios a la bodega del avión y lo suben de nuevo al finger en el destino.

Una vez terminada la facturación, las familias cuentan en la T4 con un filtro de seguridad exclusivo para familias, más amplio que el habitual. A la hora de embarcar las familias son las primeras. Así se sientan y colocan sus bultos con tranquilidad. La tripulación entrega un cinturón especial para los bebés que viajan sin ocupar asiento, y explica a los padres cómo colocarlo. Además, la tripulación entrega a bordo a todos los niños un kit de entretenimiento, para que dibujen a bordo, y el tiempo se les pase volando.

En la web de Iberia es donde se encuentran siempre los mejores precios. Es posible encontrar billetes de ida y vuelta desde solo 67 euros.